Ya se que no hay amor sin soledad,
que a veces las palabras se terminan,
que a veces es preciso una mentira,
que a veces hay pereza en nuestras manos.
Si, ya se que estás cansada de escuchar
al viento que al pasar por tu ventana
te dice que vendré quizá mañana
y miras de reojo hacia la calle.
Si, si, si
Te quiero con el corazón.
Tu serás para mí, yo tu amor.
Si, ya se que el tiempo es algo que se va,
que no lo para el llanto ni la risa,
que vale más la luz de una caricia
que la esperanza lenta de unos besos.
Si, ya se que estás cansada de esperar.
Ya se que han florecido tus mejillas.
Ya se que estás amándome a escondidas.
ya se que estás mujer, enamorada.
Si, si, si
Te quiero con el corazón.
Tu serás para mí, yo tu amor.
Si, si, si
Te quiero con el corazón.
Tu serás para mí, yo tu amor.
Si quieres encontrarme
búscame entre la gente llama de mi tierra
a caballo del sol y las estrellas
o en la dulce penumbra de mi cama.
Si quieres encontrarme
pregúntale al espino
y te dirá que paso cada mañana por el camino
Si no me encuentras ven a mi casa,
me encontraras llorando
por lo que pasa, por lo que pasa.
Si quieres encontrarme
búscame bajo la sombra gris de las encinas
a caballo del viento y las colinas
o subido en la torre de la iglesia.
Si quieres encontrarme
acércate a mi huerto
me encontrarás llorando
por lo que siento, por lo que siento.
Si no me encuentras ven a mi casa,
me encontraras llorando
por lo que pasa, por lo que pasa.
Si quieres encontrarme
búscame acariciando el cuerpo de mi guitarra
dibujando sus cuerdas en mi cara
o escuchando sus notas que suspiran.
Si quieres encontrarme
acércate a mi huerto
me encontrarás llorando
por lo que siento, por lo que siento.
Si no me encuentras ven a mi casa,
me encontraras llorando
por lo que pasa, por lo que pasa.
Narai narai ….
Cantando viene contento por el camino
trae en la mano una rosa
y en su pecho campesino
un corazón de metal
para librarse del frío.
De ti quisiera pastor, tener el alma de niño.
Cantando viene contento por el camino
atrás quedó su montaña,
su rebaño junto al río
y su pequeño guardián
sentado junto al camino.
De ti quisiera Julián, tener el alma de niño.
Y una mujer morena te esperará
para secarte sudores
y junto al fuego te besará
calmando tus sin sabores.
Y cuando llegue mañana te marcharás
dejando lejos tu aldea
y a tu rebaño regresarás
dejando sólo en la aldea el corazón.
Cantando marcha contento por el camino,
atrás quedará su casa,
su bello amor y sus hijos.
Pensando en ellos se irá
cantando por el camino.
Tú siempre serás pastor el mejor amigo mío.
Yo quiero ser encina para darte sombra,
quiero ser tu alma para estar en ti.
Yo quiero ser
suspiro de tus labios, quiero ser,
suspiro de tus labios,
suspiro de tus labios, quiero ser,
suspiro de tus labios.
Yo quiero ser el llanto de tu despedida,
y de tus mejillas quiero ser la piel.
Yo quiero ser
el sí de tus preguntas, quiero ser,
el sí de tus preguntas,
el sí de tus preguntas, quiero ser
el sí de tus preguntas.
Yo quiero ser el viento que llega hasta tu ventana
y velar tu sueño bajo tu almohada.
Yo quiero ser tu blanca habitación
la luz de tu balcón,
tu amigo confidente,
tu blanca habitación,
la luz de tu balcón,
tu amigo confidente.
Yo quiero ser tu espejo, quiero ser tu cama
quiero ser la brisa de tu amanecer.
Yo quiero ser
perfume de tus manos, quiero ser,
perfume de tus manos,
perfume de tus manos, quiero ser,
perfume de tus manos.
Yo te daré todo lo que soy, todas mis caricias,
cuando seas mía, cuando seas mía.
Yo quiero ser
tu blanca habitación, la luz de tu balcón,
tu amigo confidente,
tu blanca habitación, la luz de tu balcón,
tu amigo confidente,
tu blanca habitación, la luz de tu balcón,
tu amigo confidente.
La la ra ra….
Tu tiempo de amor será para ti
el día que tenga una casa.
Tu campo feliz, un cielo de abril
y un aire que respirar.
Un trozo de pan, un lecho de amor
y un árbol para cuidar.
Tendremos la fe del que quiere dar
su vida en el amor sin pedir nada mas
la verdad en la piel y en el alma el calor
y la dicha en la frente.
Veremos nacer la lluvia y la flor
el día que tenga una casa.
Y todo mi amor será para ti
la noche y el despertar.
Las horas de luz, la noche de azul,
y el tiempo junto al hogar.
Y el beso feliz del que quiere dar
su vida en el amor sin pedir nada mas
la verdad en la piel y en el alma el calor
y la dicha en la frente.
El sol brillará tan solo por ti
el día que tenga una casa.
Y en una pared, un viejo reloj
las horas olvidará.
Podremos hablar, podremos vivir
muy lejos de la ciudad.
Tendremos la fe del que quiere dar
su vida en el amor sin pedir nada mas
la verdad en la piel y en el alma el calor
y la dicha en la frente.
El día que tenga una casa.
Podrán pasar los años
y olvidar los campos donde ayer jugué.
Podré olvidar mis versos
que en aquel colegio escribí ayer.
Podré olvidar
el día de la fiesta en mi lugar,
aquella sensación de libertad,
la tarde de un domingo.
Pero jamás yo podré olvidar
aquel amor primero,
que fue sincero, que fue verdad.
Pero jamás yo podré olvidar
aquel amor primero,
que fue sincero, que fue verdad.
Podrá quedar muy lejos
ese pueblo viejo que dormía al sol.
Podré olvidar el tiempo
que burlando al viento me sentí mayor.
Podré olvidar
las horas de la siesta en el desván,
mi caja de pinturas
y mi afán de ser poeta un día.
Pero jamás yo podré olvidar
aquel amor primero,
que fue sincero, que fue verdad.
Pero jamás yo podré olvidar
aquel amor primero,
que fue sincero, que fue verdad.
Podré olvidar mi sombra
que de vez en cuando me enseñó a jugar.
Podré olvidar mi nombre
que a pesar de pobre me gustó llevar.
Podré olvidar
la caricia del viento que al pasar
dejaba cada tarde en mi portal
las hojas en otoño.
Pero jamás yo podré olvidar
aquel amor primero,
que fue sincero, que fue verdad.
Pero jamás yo podré olvidar
aquel amor primero,
que fue sincero, que fue verdad.
No volverán Rosalí
aquellos besos de mi amor primero.
No volverán Rosalí
ni volveré a ser feliz bajo tu techo.
No volverán Rosalí
nuestras miradas a guardar silencio.
No volverán Rosalí
ni volveré a ser feliz bajo tu techo.
Si quieres recordarme, recuérdame.
Si puedes olvidarme, olvídame.
Si buscas un amigo, llámame,
te ayudaré a vivir.
Si buscas otro amor, lo encontrarás.
Si luchas por la vida, triunfarás.
Si quieres sonreír, sonreirás,
serás feliz. Pero…
No volverán Rosalí
aquellas hojas que arrastraba el viento.
No volverán Rosalí
ni volveré a ser feliz bajo tu techo.
Si quieres recordarme, recuérdame.
Si puedes olvidarme, olvídame.
Si buscas un amigo, llámame,
te ayudaré a vivir.
Si buscas otro amor, lo encontrarás.
Si luchas por la vida, triunfarás.
Si quieres sonreír, soreirás,
serás feliz.
Hace tan solo diez años
que te fuiste de la aldea,
cambiaste tu prado verde
por un pedazo de acera,
por un infierno de asfalto
y una casa en las afueras.
Labrador, labrador que hueles a tierra y campo
recuerda que la ciudad, labrador,
la hicieron para los sabios
y no para un segador.
Labrador, labrador tu tierra te está llamando
ya está madura tu mies, labrador,
y tu cigarra cantando
y tus encinas al sol.
Te vestirás de corbata,
de camisa y de chaqueta
para venir a tu pueblo
en el día de la fiesta.
Traerás cochecito nuevo
dirás que poco te cuesta.
Y después labrador
te irán llegando las letras
y todas en un cajón guardarás
metidas en tu carpeta,
bañadas con tu sudor.
Labrador, labrador te dije que no te fueras
que vale más un pedazo de pan
comido bajo una higuera,
que una rosquilla en ciudad.
Labrador, labrador que hueles a tierra y campo
recuerda que la ciudad, labrador,
la hicieron para los sabios
y no para un segador.
Labrador, labrador.
Deja tu pueblo y olvídate,
mira que llegó la noche.
Toma el camino y aléjate
con tu espada y tu capote.
Pronto la gente comentará
al despertar la mañana,
unos dirán se marchó del hogar
otros dirán se escapó.
Comentarán tu razón de marchar
bajo la luz de un farol.
Torero, capote, sombrero y olé
y pierde la razón, mira su balcón,
sola se quedó la calle.
Y cruza sin mirar, silba una canción
y deja su pueblo atrás.
Pelo marrón, cazadora azul
y quimeras a la espalda.
Traje de luces en oro y gris
y en sus ojos esperanza.
Cielo de estrellas, ombligo al sol
y un corazón que se escapa
y el maletilla será matador
dice la gente que pasa.
Y cada noche la misma canción,
vuelve su sueño a escuchar.
Torero, capote, sombrero y olé
y pierde la razón, baila bajo el sol
pronto bailará en la arena.
Y en aquel balcón que dejó al partir
pronto nacerá una flor.
Torero, capote, sombrero y olé
Quisiera decir, quisiera decir,
quisiera decir tu nombre.
Quisiera decir, quisiera decir,
quisiera decir tu nombre.
Quisiera contarte
que tengo abierta una herida
que todo el tiempo y la vida
nunca lograron cerrarme.
Quisiera contarte
que tengo llanto en la risa
que estoy muriendo de prisa
entre la tarde y la noche.
Quisiera decir, quisiera decir,
quisiera decir tu nombre.
Quisiera decir, quisiera decir,
quisiera decir tu nombre.
Quisiera decir, quisiera decir,
quisiera decir tu nombre.
Quisiera contarte
que están mis noches vacías
que solo tengo alegría
cuando recuerdo tu nombre.
Quisiera contarte
que está mi casa vacía
que está acabando mi vida
que está llegando la noche.
Quisiera decir, quisiera decir,
quisiera decir tu nombre.
Quisiera decir, quisiera decir,
quisiera decir tu nombre.
Quisiera decir, quisiera decir,
quisiera decir tu nombre.
Quisiera contarte
que ha sido largo el camino
que se ha burlado el destino
de mis proyectos de entonces.
Quisiera contarte
que no hay amor en mi vida
que solo tengo alegría
cuando recuerdo tu nombre.
Quisiera decir, quisiera decir,
quisiera decir tu nombre.
Quisiera decir, quisiera decir,
quisiera decir tu nombre.
Quisiera decir, quisiera decir,
quisiera decir tu nombre.
Quisiera decir, quisiera decir,
quisiera decir tu nombre.
Quisiera decir, quisiera decir,
quisiera decir tu nombre.